Carta abierta a Paris Hilton

Amiga Paris, eres todo lo que una persona quiere ser. Eres admirada, incluso benerada; eres bella, eres rica, eres importante, eres un referente y no has hecho nada en tu puta vida. Tu familia montó un imperio hotelero de la nada, de esa clase de gente que un día le echo huevos al asunto y al final consiguen cagar billetes de 500 €. Tú, amiga Paris; eres el resultado de ese esfuerzo, la tipica niña pija de familia guay que no pega un palo al agua, pero la diferencia con el resto de los mortales; es que tu has tenido la cara suficiente de hacer de esta falta de escrupulos tu principal modo de ser.

Y yo te admiro por eso. Todos queremos vivir sin dar un palo al agua, y tú lo has conseguido. Eres portada, primera pagina y contraportada de todos los medios de comunicación del planeta. Para lo bueno y para lo malo eres noticia; y lo eres siempre. También te admiro por eso, no haces nada y eres noticia; sales a pasear con tu perro y eres noticia, sales sin bragas a la calle y eres noticia, ocupas portadas cuando paseas tu palmito por la premier de una peli en la que ni siquiera participas, tus escandalos venden millones en un país lo suficientemente grande como para tener 15 portadas distintas al día.

En el fondo eres como cualquier joven del mundo; vives de tus padres. Pero con la diferencia de que la vida es mucho más fácil cuando te apellidas Hilton que Rodriguez. La gente te odia por eso, y tu lo sabes. Yo no. Es más fácil sacar un disco, aunque sea una puta mierda; si te apellidas Hilton. Fijate si te gusta poco trabajar que ni lo presentantes en directo. Sacastes un disco con portada provocadora, un video medio en pelotas y con “Paris Hilton” en la portada. Eres lista; eso se vende solo. Quizás si hubieses cantado, todo se hubiese ido al garete. Pero te vuelvo a repetir, que a mí me da igual que hagas o desagas. La vida es demasiado dura como para ponerse a trabajar. Además, ¿Para qué trabajar siendo Paris? El dinero te llega a expuertas solo con ponerte de perfíl para las fotos… sigue así; imaginate que un día te pones a trabajar y pasas a un segundo plano. Eso querida señorita, sería tu perdición. ¿Te imagnias llegar a una fiesta y no deambular entre un mar de flashes?

Eres admirada, te lo he dicho antes. Hay gente que te idolatra. Yo no llego a tanto. Hay gente que se muere por tus huesos, se que hay gente que cree que te ha costado llegar hasta donde has llegado. Mientras esta clase de gente sale por TV tu estás en tu casa muriendote de la risa; seguramente, rodeada de 2 o más moramos que conocistes en tu última party. Eso es un martes cualquiera en tu vida. ¿Y entre tanto tio que se muere por estar contigo, no has encontrado aún a nadie interesante? Conmigo no cuentes, una cosa sería una noche en tu compañía y otra bien distinta aguantarte a tí y a tus amistades de por vida. Tu mundo no está hecho para mí, no me veo aguantandote el perro mientras te pruebas unas sandilias de 648 $ que solamente te pondrás para ir a una barbacoa solidaria. Lo que me cuesta creer es que nadie este dispuesto a compartir tu vida. Una de dos; o eres muy exigente o te gusta más la fiesta que a Pocholo Martinéz Bordiu (que es como tú pero en cañi y con cierto problema mental, que en definitiva mola más). Se que una tía de tu posición es exigente, lo es cualquiera, así que no creo que Paris Hilton sea menos. Pero que te gusta la noche, las zonas VIP, los morlacos sudorozos, el no rendirle cuentas a nadie etc. tambíen lo sé. Y no me importa; de verás. Cada uno hace con su vida lo que quiere, y si tú has decidido que prefieres emborracharte por un tugurio (también conocidos como locales chic) de L.A. con la Spears en vez de pasear del brazo de tu amado, yo lo respeto. Eres joven, rica y guapa… puedes esperar.

Paris presentando su disco; el día que más ha trabajado de su vida.

Porque otro tema es ese. Que eres guapa. Y un rato largo. No estás entre mis predilectas y me encuentro con gente cada día que quizás (digo quizás, por el tema de gustos personales) sea más guapa que tú. Pero estás no llevan vestidos de 3140 $. Channel es para ellas algo que presenta ropas raras en las pasarelas de Paris (capital de Francia). Eres de esa clase de gente que podría argumentar, sin ruborizarse; que mis zapatos cuestan más que vuestras casas. Esto ayuda, y más si no te gastas un duro en ropa, que pareces un deportista con contrato publicitario. Las casas de moda se pegan para que aparezcas con su ropa en sitios en los que no pintas nada, lugares a los que solo vas por todas esas “cualidades” que tienes. Y si ha esto le sumas que de vez en cuando se te olvida ponerte la tanga, apaga y vamonos.

A cualquiera que haya llegado a este punto le estará rondando una palabra: envidia. Te odian por envidia y te admiran por envidia. Yo estoy en medio. Te admiro, el feo y pobre quiere ser guapo y rico; te odio porque una cosa es echarle cara y otra bien distinta es ser tan jeta de la vida. El principal problema es que quieres tú de los demás. En tu vida no todo será bello, has estado en la cárcel por conducir pedo; por lo tanto has conocido la miseria; cosa que yo con la triste vida que tengo (triste comparándolo con tu fortuna, tus fiestas etc.) no he conocido en mi vida. Quiero saber una cosa ¿Compensa todo esto? ¿Compensa ser el foco de todas las miradas? Se que cuando alguna locaza de revista te pone verde, a ti te la suda… tu eres Paris Hilton y si quieres tu compras la mierda de revista donde trabaja y la despides. Pero ¿Compensa? No te digo que trabajes, faltaría más, solo te comento, desde esta predicación en el desierto; que ya va siendo hora de que hagas algo con tu vida.

Lo primero, cambiar. Si quieres ser alguien de verdad importante, en el sentido Que bien me siento conmigo misma porque he hecho algo; debes cambiar. Debes dejar atrás las fiestas, tu no trabajo y HACER ALGO COPÓN. Mira a tus amiguitas de juergas, también han estado en la cárcel (hablo de la B Spears & cia.) pero ellas se han pasado de la raya. Están de psiquiátrico y son adictas a todo lo imaginable. De entrada, tú; que eres tan grande, no has llegado a tanto, pero cuando veas las barbas de tu vecino cortar…

Tu abuelo ha dicho que no vas a ver un duro que venga de su bolsillo; incomprensiblemente esa noticia colapso el mundo; ni que fuera el único abuelo con una nieta un poco pilingui, pero aquí también se ve el peso que tiene tu apellido, amiga Paris. Esto ha hecho que ya hayas grabado un disco, protagonizado una película, hecho anuncios, diseñado ropa y ha hecho que tengas tu propio reality, donde apareces con otra rubia, que la verdad; no te llega ni a hacer sombra. Se nota que eres lista, ¿verdad? ; la próxima vez a ver si montas algo que te haga madrugar.